¿Cuál es tu
reacción ante la adversidad? que debemos hacer exactamente en el momento. Sí,
naturalmente las palabras que más redundan es ser positivos, tener actitud, ser
invencibles, sonreír… y un sinfín de pensamientos al respecto.
En un primer momento no necesariamente
es o debe ser así, cuando se presenta ante ti un conflicto sucede que nos
adaptamos y mientras esto pasa entramos en crisis emocional porque no sabemos
hacia dónde dirigir nuestra energía ¿Qué debo hacer entonces? lo más sano es
vivir las emociones, dejarlas fluir, hacerlo parte de ti el tiempo que sea
necesario pues progresivamente lograremos el equilibrio y tendremos claridad
para solucionar lo que nos acontece.
La vida no tiene un
protocolo, no se nos es entregado un libro donde debemos seguir tal cual paso.
Citare una reflexión… nosotros construimos las reglas y dotamos de significado cada una de nuestras vivencias. Te invito a que recuerdes a un personaje histórico
que te parezca interesante o admires mucho. Hagamos memoria de aquellos
personajes históricos que se salieron de la norma, que no siguieron un “modelo
de vida” quienes nunca se rindieron, decidieron salir de lo habitual porque ya
no había más alternativas más que crear sus propias condiciones. Lo mismo
sucede cuando toca la adversidad, cuando las soluciones que conoces no te dan
mayor satisfacción o no resuelven lo que necesitas. Tenemos que avanzar y
seguir luchando por sobre todas las cosas. Puedes permitirte estar mal,
preocupado, triste y todo en cuanto necesites “depurar” de tu interior para
entonces continuar.
La adversidad nos
regala fortaleza emocional, nos convertimos en aquellas que perseveramos.
Trabajamos cada día en nuestro objetivo, nos comprometemos con nosotros mismos,
si esto no funciona cambiamos la estrategia. Lo más satisfactorio es el plasmar
nuestra actitud en ello. Esta la segunda parte, el tener una mentalidad en la
que tus pensamientos se transformen y hagamos de la adversidad un aprendizaje
que nos llevará a ser mejores y crear la armonía en nuestra vida.
No olvidemos además
agradecer por las cosas que tenemos por mínimas que sea, te invito a que lo
hagas diario y veras que al final del día nos percibiremos afortunados.
Habrá situaciones en las que amerite un acompañamiento profesional por lo que este artículo no sustituye
un proceso psicoterapéutico pues cada caso es distinto y tiene que recibir atención personalizada.
Gracias por
acompañarme hasta aquí, si fue de interés este artículo no olvides compartirlo
con las personas que lo puedan necesitar. Si deseas contactar conmigo puedes
hacerlo mediante el formulario que te aparece en la barra derecha o da clic
aquí.
Gracias por tu mensaje, es muy interesante, la verdad me puse a reflexionar.
ResponderBorrar